Kaymaklı es una de las ciudades subterráneas en la región de Capadocia. No sabemos cuándo fue construida. Su función principal era guarecer a los habitantes de la región en caso de invasiones. Era un refugio para los moradores. La ciudad fue escarbada en el débil subsuelo ceniciento de Capadocia. Esta alcanzó un tamaño tal que podía recibir a miles de personas, guareciéndolas por espacio de hasta seis meses.
Tiene ocho niveles subterráneos descubiertos hasta ahora, de los cuales los cuatro superiores están abiertos al turismo. Los inferiores permanecen parcialmente obstruidos, o reservados para investigadores. Fue descubierta en 1964.
Tiene una sola entrada; pero una vez en el subsuelo, se extiende por 2,5 km². En el interior se encuentran áreas destinadas a almacenes de alimentos, establos, cisternas, cavas, cocinas, iglesias e inclusive sepulturas dispuestos en un laberinto de túneles y escaleras. En las cocinas, se aprecia que las paredes y el techo están impregnados de hollín.
La ciudad cuenta con pozos de ventilación. La entrada es protegida por una piedra en forma de disco que se hacía girar para bloquear el paso por completo, y que solamente podía hacerse girar desde dentro.
En las iglesias existen restos de los frescos bizantinos que las adornaban. Existe un túnel subterráneo en dirección a vecina ciudad subterránea de Derinkuyu (9 km al sur), aunque el túnel no ha sido completamente liberado por lo que no se sabe si en la práctica existía comunicación subterránea entre estos dos refugios.